Cada primavera, la naturaleza parece decidir que el hielo merece un último acto antes de abandonar los lagos y ríos. Así surge el llamado “hielo podrido” o candle ice, un fenómeno en el que el hielo, en lugar de disolverse silenciosamente, se convierte en un bosque de agujas cristalinas que suenan como campanillas de vidrio cuando el viento sopla.
A ojos de los geólogos, no es más que el resultado de la radiación solar debilitando los lazos moleculares del hielo; pero para cualquiera que lo contemple, es un espectáculo tan hipnótico como efímero.
Un hielo afilado en el que puedes ahogarte
Su estructura, que recuerda a las velas encendidas de un ritual, surge cuando el calor y las filtraciones de agua de deshielo penetran el hielo consolidado, creando un patrón columnar casi perfecto. Así lo detalla John P. Bluemle en la revista Prairie Pothole: cada columna de candle ice es como una diminuta catedral de cristal. Pero detrás de esta delicada belleza está un enemigo mortal para cualquiera que se aventure a caminar sobre él, pues su resistencia es engañosa.
En realidad, el hielo podrido es un traicionero disfraz. Según los estudios del Cold Regions Research and Engineering Laboratory, aunque conserva la apariencia sólida del invierno, su integridad es apenas una ilusión: puede colapsar con el peso de un paso o el temblor de un remo. Por eso, cada año, las autoridades locales alertan a la población para que no confíe en la aparente estabilidad de estas láminas de cristal, tan frágiles como el sonido de las gotas que las erosionan.
@vandalrandom El misterioso HIELO PODRIDO 🧊 #ciencia #hielo #curiosidades #vandalrandom ♬ sonido original - Vandal Random
Pero no todo es peligro: el hielo podrido es también un narrador de historias. Como subraya Cecilia Bitz, especialista en criosfera de la Universidad de Washington, su aparición es una sinfonía de la energía solar, el viento y las minucias de la física del agua. El candle ice nos cuenta que el mundo cambia a cada momento y que los ciclos de fusión y recristalización ofrecen pistas invaluables para entender cómo responde la criosfera al cambio climático y a las estaciones.
