Shuffle Tactics es una propuesta independiente que nace a manos del estudio Club Sandwich con un claro objetivo en mente: rendir homenaje a los grandes clásicos del género del RPG táctico. Lo hace dando una nueva vuelta de tuerca al concepto, reinventando una fórmula de eficacia probada por medio del empleo de las mecánicas habituales del estilo roguelike. El pasado 21 de febrero se lanzó en Steam la primera demostración jugable con la que echamos un vistazo a su peculiar puesta en escena. Para ello ponemos rumbo al reino de Asteria, donde los estragos de la Maldición del Glimmer nos enfrentan a una legión de Moradores Corruptos que nos exigen dar lo mejor de nosotros mismos sobre el campo de batalla.
El Destello se extiende por todo el reino de Asteria, y solo un selecto grupo de héroes será capaz de hacer frente al mal que acecha. De todos, Dóbercid es el primero al que tenemos el gusto de conocer. Este veterano de guerra, un can con forma humanoide, es un antiguo miembro de la Guardia Real con un pasado "repleto de desgracias", cuya lucha contra el Destello le permite encontrar consuelo por sus adictivos poderes. Tras seleccionarlo y empaparnos de información sobre su pasado, pasamos a elegir nuestra habilidad principal, dando así comienzo la aventura. En este caso solo podemos seleccionar "Lanzamiento de espada", una carta que infringe daño y que cuenta con varias habilidades específicas: armado, innata y recuperable.
Libertad para elegir cómo progresar
Tras seleccionar a nuestro héroe y la habilidad especial que vamos a emplear en batalla, es turno de elegir el camino por el que queremos avanzar hasta llegar al jefe final. Una de las peculiaridades de Shuffle Tactics es la gran libertad que ofrece a la hora de elegir qué tipo de combates preferimos librar, una decisión que tomaremos en base a los mazos que vayamos construyendo. Existen varias disposiciones y tipos de misiones. Cada misión puede a su vez dividirse en varios niveles de dificultad en función del tipo y la cantidad de enemigos que esta tenga. Por lo general, al comenzar a jugar tendremos que participar en una batalla normal, relativamente poco exigente. En su descripción se nos informa de la cantidad de oro que obtendremos al superarla, cuántas cartas podremos elegir al ganar, el número de amuletos o reliquias que podemos encontrar, etcétera.
Al tratarse de un título que utiliza las características del estilo roguelike, escoger las cartas adecuadas, las que mejor se adapten a nuestra forma de jugar, es fundamental para fortalecernos. No somos nosotros los que subimos de nivel, sino nuestros mazos: a medida que transcurre la partida encontramos cartas cada vez más potentes, capaces no solo de causar más daño, sino también de cubrir superficies más amplias. La variedad de enemigos que hemos encontrado es bastante grande y ha justificado tener que pararnos a pensar antes de escoger cualquier carta al azar. Y lo que es más importante aún: las sensaciones que transmite el juego mejoran mucho con el paso de las horas, ya que los combates van ganando en riqueza y variedad.
En el campo de batalla
Ya en el campo de batalla, podemos ver la acción desde una perspectiva isométrica que, pese a permitir desplazarse con las teclas WASD no da la posibilidad de rotar lateralmente el mapa, algo un tanto extraño si tenemos en cuenta la importancia que tiene el lugar que ocupa cada personaje en sobre la cuadrícula. Conceptos como la diferencia de altura o si estamos ubicados en un lateral o por detrás del enemigo son muy importantes para mejorar el rendimiento de los ataques o, por lado contrario, para sufrir mayores daños si el enemigo logra flanquearnos.
Bien sea para atacar o para desplazarnos por la cuadrícula, primero hemos de seleccionar una de las seis cartas que forman parte de nuestro mazo inicial. Aunque estas aparecen de manera aleatoria entre todas las que tenemos, en estos primeros compases de la demo contamos con una variedad algo limitada, aunque interesante para ilustrar el funcionamiento básico de la mecánica de juego. Con la carta Tajo, por ejemplo, que consume un punto de acción, ejecutamos un ataque que resta +5 puntos de vitalidad al enemigo. Al tratarse de una espada, no es de extrañar que su rango de acción sea corto y se limite a una casilla anexa a nuestra posición.
Por otro lado, Salto nos permite cubrir distancias más grandes en el mapa sin consumir puntos de movimiento, mientras que Entereza potencia nuestra armadura en 1 punto. ¿Recordáis la habilidad especial de Dóbercid, Lanzamiento de espada? Con ella podremos lanzar nuestra espada a enemigos que estén a cierta distancia, aunque si lo hacemos perderemos potencia de ataque hasta que podamos recuperarla. Embestida causa daño, pero también empuja al enemigo varias casillas en la dirección del ataque. Como veréis, toda acción tiene su reacción, por lo que incluso en estas fases tempranas de la aventura es imprescindible pensar bien lo que vamos a hacer antes de ejecutar alguna maniobra de la que nos arrepintamos.
El mundo de Asteria
Además de combatir en fieras batallas, Shuffle Tactics nos lleva a conocer a un nutrido grupo de personajes secundarios. Algunos son mercaderes que ofrecen objetos y consejos, otros mejoran nuestros atributos y permiten ampliar la cantidad de amuletos que podemos asociar a una carta específica, duplicar una de ellas, etcétera. También podemos hablar con ellos, aunque por desgracia esta opción estaba desactivaba en la demostración que hemos probado. Más allá de los mercaderes, encontramos algunas tiendas en las que, siempre y cuando tengamos el dinero suficiente, podremos comprar nuevas y mejores armas.
A la hora de elegir nuestro camino es crucial prestar atención al tipo de batallas que nos esperan en función de qué bifurcación seleccionemos. Normalmente, acompañando a las batallas normales suelen estar las batallas de élite, en las que tendremos que derrotar a más y más poderosos enemigos. No obstante, como las recompensas son también más suculentas, merece la pena probar suerte cuando hemos ganado algo de experiencia. El diseño del mapa de selección de batallas es aleatorio, por lo que cambia cada vez que nos derrotan y volvemos a él. La suerte es aquí un factor determinante a la hora de progresar.
Una progresión muy bien medida
Aunque el arranque del juego es un poco lento, a medida que avanzamos vamos entendiendo su auténtico potencial. Además de depender de las cartas que tengamos, los combates también dependen de los secuaces que vayamos contratando. Estos personajes son guerreros de distintos tipos que cuentan con sus propias habilidades, debilidades y fortalezas, además de tener su mazo propio. El ranger, por ejemplo, es ideal para ataques a distancia; el nigromante para lanzar hechizos de magia oscura; el asesino es sigiloso y cubre grandes distancias en pocos turnos, etcétera. Solo podemos elegir a dos para que nos ayuden, pero son imprescindibles para potenciar nuestros ataques.
Pongamos un ejemplo: el chamán, un personaje débil con poco movimiento, puede crear tótems que aumentan la fuerza de ataque en un perímetro específico del mapa u otros con los que amplían la vulnerabilidad enemiga. Lo que parece que en principio es un combate desequilibrado cambia por completo cuando comenzamos a realizar ataques con el doble de fuerza, lo que unido a la opción de debilitar al enemigo nos permite elaborar una estrategia defensiva. En algunos mapas encontraremos grietas desde las que surgen unidades enemigas cada varios turnos: en estas situaciones también nos interesa contar con un potenciador de fuerza que permita destruirlas con pocos golpes, ya que son unidades bastante resistentes con las que nos exponemos a ataques rivales. Ya solo contar con él cambia las sensaciones que transmiten las batallas, cuyo dinamismo y versatilidad son sin duda sus principales virtudes.
Dejando al margen las batallas, el otro factor destacado del título, uno que salta a la vista, es su peculiar estilo artístico: arte pixelado con sombreado, luces y efectos de alta calidad. Los escenarios presentan distintos biomas, aunque en la demostración son relativamente pocos y solo permiten entrever lo que nos espera en el producto final. Desde la propia página de Steam del producto se anuncia que encontraremos "contenido a raudales". A saber: tres héroes, diez compañeros, veintisiete enemigos, diez jefes, seis regiones, trescientas cartas de héroe, ciento cincuenta cartas de compañero y centenares de reliquias. Cada uno de estos elementos cuenta con su propia presentación artística. Los mapas, por otra parte, no llaman especialmente la atención: los que hemos visto nos recuerdan a otros títulos del género.
Lanzamiento: 24 de junio
Shuffle Tactics llegará al mercado el próximo 24 de junio, por el momento de forma exclusiva en Steam. Su propuesta, mezcla entre RPG estratégico y conceptos roguelike, empieza a ganar fuerza a medida que obtenemos nuevas cartas con las que ampliar el abanico de opciones en el campo de combate. Su estilo es simple y nada pretencioso: los combates son entretenidos, la variedad de cartas promete ser grande y los potenciadores y reliquias, elementos con los que se enriquece aún más una mecánica muy atractiva. Cuenta con un estilo artístico característico que no tendremos problemas en reproducir independientemente del equipo que tengamos. Las dudas que transmite llegan por la parte narrativa, ya que si bien existe un argumento, este no parece tener mucha relevancia en el cómputo global.
Saldremos de dudas a finales de junio. Mientras tanto, podéis probar la experiencia por vuestra cuenta y dejar aquí vuestras impresiones.
Hemos realizado estas impresiones en PC (Steam) con un código proporcionado por Cosmocover.